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Marcha Nórdica para personas con hipertensión: Una actividad comunitaria en el Val Miñor

Os presento un gran trabajo donde Nordic Walking Vigo, de la mano de Nacho García, instructor de este deporte, pudo ayudar a llegar a la conclusión final, «La marcha nórdica ha justificado ser un ejercicio  asequible y seguro, con el que se ha conseguido tener un efecto positivo sobre la tensión arterial. Se podrá recomendar en un futuro como activo de salud»

Autores/as

  • Antonio Sobral Arosa
  • SERGAS
  • Almudena Rivas Raña

Palabras clave: 

Marcha nordica, Hipertensión, Salud comunitaria

Resumen

Objetivo: Implantar la marcha nórdica como nuevo activo de salud en Val Miñor a través de una experiencia piloto con personas con hipertensión.

Método:

Población: 45 participantes con un 88% de asistencia (15 por ayuntamiento) mayores de 18 años con hipertensión, independientemente del momento de su diagnóstico, excluyendo personas con patología cardíaca inestable, con inestabilidad en la marcha, que ya se encontraban en un programa de ejercicio previo, personas con hipertensión secundaria y deterioro cognitivo moderado-grave.

Intervención: Trabajo intersectorial y participativo en el ámbito local de salud, generándose alianzas entre diferentes instituciones. Tres grupos de caminata nórdica + “píldoras formativas” impartidas por profesionales sanitarios y por los propios participantes. Cada grupo ha salido a caminar 1h, dos días a la semana durante 4 meses. Además, los profesionales sanitarios han acompañado en múltiples ocasiones a los participantes en la caminata.

Mediciones principales: Se han medido la Tensión arterial con esfingomanómetro digital validado, valores antropométricos con báscula de bio-impedancia, calidad de vida con encuesta EQ-5D y satisfacción a través de encuesta.

Resultados: Se ha reducido la Tensión arterial sistólica 12.67 mmHg de media. Hemos calculado el tamaño del efecto con la delta de Cohen obteniendo una d para la TAS de -0.77, IC 95% y para la TAD de -0,71, IC 95%.

Conclusiones: La marcha nórdica ha justificado ser un ejercicio  asequible y seguro, con el que se ha conseguido tener un efecto positivo sobre la tensión arterial. Se podrá recomendar en un futuro como activo de salud.

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